Florencia fue una ciudad que conocimos mejor de noche que de día. Y fue así en parte por cómo nos organizamos y en parte porque los días en invierno son mucho más cortos. Hay que tener en cuenta que en Europa a las seis de la tarde ya es de noche (o antes). Claramente esto no nos impidió recorrerla y conocerla pero creo que desde otro ángulo. Florencia es conocida por el arte y el Renacimiento pero nosotros pudimos ver una cara más melancólica y tranquila.
Llegamos desde Modena temprano por la tarde y nuestro primer destino fue el Duomo de Santa Maria del Fiore. La imponente catedral de Florencia que se esconde en el centro de la ciudad. Es verdad que es un edificio enorme que aparece en todas las vistas panorámicas de la ciudad. Pero nos pareció correcto decir que “se esconde” porque a diferencia de otras catedrales no se ve desde lejos cuando nos acercamos. Está rodeada por calles angostas sin mucho espacio entre esta y las demás construcciones.
Esto hace que nos la encontremos casi de golpe y nos llevemos una agradable sorpresa. La primera impresión es de fascinación por su tamaño y colores. La contrapartida es que es muy difícil sacar una buena foto ya que sólo es posible retratar porciones del edificio.
Luego, tras caminar por la Piazza della Signoria y pasar frente al Palazzo Vecchio, nuestra siguiente parada fue el Ponte Vecchio. El más antiguo y famoso de la ciudad, que se mantiene en pie desde la edad media y hoy en día alberga a las tiendas de los joyeros. Cuando llegamos ya era de noche y las luces cálidas inundaban la escena contrastando contra la oscuridad. Las vistas desde el puente permiten hacer hermosos boques pero no nos pudimos quedar mucho tiempo por el viento helado que lo cruzaba.
A la mañana del día siguiente fuimos a conocer la ciudad de Pisa que se encuentra a pocos kilómetros al oeste. Cuando volvimos a Florencia por la tarde teníamos el tiempo justo para visitar la Galería de la Academia. Es allí donde se exhibe el famoso David de Miguel Ángel. A nuestro gusto esta es la obra más interesante para ver, y a menos que sean entendidos del arte el recorrido no es muy largo. Además está prohibido sacar fotos por lo que no nos quedó ninguna imagen del David.
Cuando salimos ya era otra vez de noche y volvimos a nuestro Hotel. Para despedirnos de Florencia fuimos a comer pizzas a un restaurante de la zona y luego terminamos en un Irishpub que encontramos a la vuelta. Y así fue como conocimos a Florencia, casi siempre vestida de noche.
Al día siguiente salimos rumbo a la capital. Roma nos esperaba.
Ayuda al viajero:
Cómo llegamos: en tren a la estación Firenze Santa María Novella.
Dónde nos hospedamos: Hotel San Giorgio & Olimpic. Un buen hotel a buen precio y una ubicación ideal. Además la zona no era mala y podíamos ir caminando a todos lados.
Coste de la entrada a Galería de la Academia:
€8 para adultos.
Jóvenes europeos entre 18 y 25 años: 4€.
Menores de 18 y mayores de 65 años: entrada gratuita.
Más información
Pueden encontrar mucha información sobre Florencia, recorridos, museos y demás en esta página en español. También pueden entrar a la página oficial de Florencia.
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