“Para encontrar el alma de Polonia, debes buscar en Cracovia”
Wilhelm Feldman
Cuenta la leyenda que hace muchísimos años se instaló en la colina de Wawel un feroz dragón. Esta temible bestia aterrorizaba a la población, devoraba el ganado y, en ocasiones, a vírgenes inocentes. Muchos valientes guerreros intentaron derrotarlo pero fracasaron.
Todo parecía perdido hasta que apareció Skuba, un humilde zapatero de mucho ingenio. Él tomó el cuerpo de una oveja, lo rellenó con azufre y lo dejó frente a la cueva del dragón. Cuando la bestia lo vio se lo devoró de un bocado. Al instante un ardor comenzó a consumirlo por dentro y fue al río a beber. Pero por más que bebía no lograba apagar tal ardor. Bebió y bebió hasta que finalmente ¡explotó!
Esta es la leyenda más conocida de Cracovia y cuenta cómo a partir de ese momento se fundó la ciudad. Pero como todos saben esta es sólo una leyenda y la realidad está en los libros de historia. Lo que no muchos saben, en cambio, es que Cracovia sí fue atormentada por una bestia aterradora. Una bestia que al igual que en la leyenda se asentó en la colina de Wawel y desde allí se devoró a miles de personas con gas y fuego. Esta vez no hubo un zapatero ingenioso que los liberase. Pero al cabo de un tiempo este monstruo se fue consumiendo por su propia maldad. Y bebió tanto de la desgracia de sus víctimas que tuvo el mismo destino que el dragón de la leyenda. Este monstruo fue conocido como el nazismo en Polonia.
La historia de Cracovia, al igual que muchas ciudades europeas, está plagada de luces y sombras. De momentos de gloria y noches muy oscuras. Y cada uno fue dejando su marca tanto en la ciudad como en los alrededores, tanto sobre como debajo de la tierra.
Estamos seguros de que quien viaje a Cracovia se sorprenderá con lo que encontrará y al final, tal como nos pasó a nosotros, deseará haber podido quedarse más tiempo. Pero como hay tanto que ver en Cracovia no debemos retrasarnos más. Comencemos con la visita a la ciudad más emblemática de Polonia.
Que ver en Cracovia: Recorriendo el Casco Antiguo
Declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1978, el casco antiguo esconde muchos secretos y encierra algunos de los principales atractivos que ver en Cracovia.
Murallas y parque Planty
Un buen punto para comenzar a recorrer la ciudad y revelar sus misterios es junto a la fortificación conocida como Barbacana. Ubicada al norte de la Ciudad Antigua, esta curiosa fortificación en forma de herradura fue levantada para proteger la puerta que encontramos detrás. Conocida como puerta Florian y regenteada por un poderoso torreón, esta era la más importante de las 8 puertas que daban acceso a la vieja Cracovia.
El sistema completo de defensas estaba formado por un poderoso muro con 47 almenas, un muro secundario más bajo y un foso. La Barbacana al norte y el Castillo en la colina Wawel al sur completaban la defensa. Pero, ¿qué fue de toda esta construcción? Al igual que en toda Europa los tiempos cambiaron y los muros se volvieron inútiles y caros de mantener. En el siglo XIX, en una decisión no poco polémica y discutida por los habitantes, el estado decidió derribarlos. El foso se rellenó y el su lugar aparecieron las Planty, como se conoce al cinturón verde de 4 km que rodea el casco antiguo. Sólo permanece en pie una pequeña porción junto a la puerta Florian.
Esta sección de muro que sigue en pie hoy es un refugio para artistas. En uno de esos cambios increíbles que tiene la historia, los poderosos muros diseñados para repeler a los mongoles hoy son el soporte de decenas de delicado cuadros. Un cambio hermoso.
¡Prestá atención! Aunque los muros ya no están, luego de la demolición se marcó el suelo con piedras blancas que indican dónde solían estar. Pueden buscarlos a lo largo de las Planty. Si encuentran un cuadrado es que están frente a donde solía elevarse una torre de vigilancia.
Plaza Mayor (Reynek Glowny) y el Mercado de Cracovia
Bajando por la calle Florianska llegaremos al símbolo y orgullo de Cracovia: la Plaza Mayor. Y no hay nombre que esté mejor colocado que este. Con sus 200 x 200 m es la plaza medieval más grande de Europa y el corazón de la ciudad. Aquí se celebran festivales de todo tipo y es el lugar ideal para disfrutar de un café al aire libre si el clima lo permite.
Resulta raro que una ciudad medieval (que normalmente es un intrincado laberinto de callejuelas) tenga un espacio abierto tan grande y simétrico. Y la razón, como suele suceder en Cracovia, tiene un origen poco feliz: las invasiones tártaras. En el siglo XIII la ciudad fue arrasada y quemada. La mayoría de las casas debieron demolerse y en el espacio resultante se abrió la plaza (1257). Tiempo más tarde se convertiría en un importante centro del comercio de la región. Como un Wall Street medieval. Como les contábamos, Cracovia está llena de luces y sombras.
En el centro de la plaza se construyó la Lonja de los Paños. En este imponente edificio, además de oficinas administrativas, se centraba el comercio de telas (paños). Como pueden imaginarse era la principal fuente de ingresos de Cracovia lo que ameritaba un edificio propio. El resto de los comerciantes debían conformarse con puestos de madera que llenaban el resto de la plaza. Hoy en día los puestos de la Lonja de los Paños están llenos de vendedores de artesanías y chucherías. Los tiempos definitivamente han cambiado.
Un verdadero mercado. Lamentablemente ya no encontrarán un verdadero mercado en el caso antiguo salvo tiendas para turistas. Esto no significa, sin embargo, que no existan. En distintas partes de la ciudad existen mercados donde van los locales a comprar sobre todo frutas y verduras. Pero también pan, carne y todo tipo de cosas. Vale la pena visitarlos para conocer algo auténtico de la ciudad. Uno de ellos está en la plaza Rynek Kleparski a pocos metros de la estación central de trenes.
Junto a la Lonja de los Paños está la torre del ayuntamiento, a lo que uno se podría preguntar ¿Dónde está el ayuntamiento? Bueno, estaba junto a la torre pero fue demolido en una de las remodelaciones de la plaza. Hoy ofrece una gran vista de Cracovia pero ¡cuidado! Sólo se puede subir por una escalera bastante ajustada.
Finalmente podemos nombrar dos edificios que rompen con la simetría de la plaza. Esto son: la iglesia de Santa María y de San Adalberto. La primera está torcida y la segunda en medio de la plaza totalmente fuera de contexto. Esto se debe a que son los únicos edificios que se ven hoy que ya estaban antes de la creación de la plaza.
La iglesia de San Adalberto es interesante por dos motivos. Por un lado, vemos cómo una de sus entradas está por debajo del nivel actual del suelo, lo que evidencia la variación de este. Y por otro, que el suelo a su alrededor es de piedras blancas. Eso marca donde estaba el antiguo cementerio de la iglesia así que ¡cuidado cuando pisen!
La iglesia de Santa María por su parte, es la más importante del casco antiguo y está cargada de leyendas. Una de ellas es la del trompetista que cada hora en punto toca una corta melodía desde la torre más alta. Cuenta la leyenda que el trompetista debía dar la alarma en caso de incendio o invasión. Y así lo hizo cuando llegaron los mongoles. Pero al hacerlo fue alcanzado por una flecha de los invasores y su melodía se cortó abruptamente. Por si se lo habían preguntado: sí, es un trompetista de verdad, que cada hora en punto toca su corta melodía a los cuatro vientos y saluda al público.
Otra leyenda de la iglesia hace referencia a porqué sus torres no son simétricas. También es trágica y quienes quieran conocerla pueden leerla en este link.
Una ciudad subterránea. En la Lonja de los Paños se encuentra otro de los atractivos que ver en Cracovia: el museo Reynek Underground. Al igual que en Edimburgo, Cracovia cuenta con una ciudad subterránea que fue quedando sepultada por el paso del tiempo. Según nuestra guía, el nivel del suelo estaba un par de metros por debajo del actual. Esto se puede ver, por ejemplo, en que todos los edificios que dan a la plaza tienen sótano. Ese sótano era la entrada principal de la vivienda, mientras que la actual era el primer piso. Presten atención su visitan alguno de los restaurantes o cafés.
Con todo la Plaza Mayor es un buen lugar para sentarse al aire libre y almorzar, o tomar un café. Allí podrán observar el paso constante de los blancos carruajes, el ir y venir de los estudiantes o los niños jugando con las palomas. ¡Pero cuidado! Que según la leyenda son caballeros transformados en pájaros.
Collegium Maius y Universidad Jaguelónica
Antes de continuar por el Camino Real para llegar hasta el Castillo de Wawel, conviene hacer una parada en el antiguo Collegium Maius. Este edificio tiene más de 500 años y por sus aulas pasaron personajes ilustres como Nicolás Copérnico y Karol Wojtyla (Juan Pablo II).
En el siglo XV también estudió aquí Nawojka, una mujer desconocida para el mundo pero de un gran ejemplo. En aquel entonces las mujeres tenían prohibido estudiar por lo que ingresó a la universidad disfrazada de hombre. Eventualmente fue descubierta y corría pena de muerte pero logró conmover a los jueces por su amor a la ciencia. Se le permitió seguir estudiando pero encerrada en un convento. Con todo, las mujeres no fueron admitidas hasta 200 años más tarde.
La tradición universitaria de Cracovia se mantiene hasta nuestros días y es elegida por muchos para el programa Erasmus.
La colina de Wawel
Si continuamos por el Camino Real (calle Grodzka) desde la Plaza Mayor, llegaremos a la colina de Wawel junto al río Vístula. Más allá de las leyendas, este fue el primer asentamiento humano de la zona por razones lógicas: terreno elevado junto al río y suelo rocoso en contraste con el terreno pantanoso de los alrededores.
Por muchos años Cracovia fue la capital de Polonia y Wawel el centro del poder. En la catedral se coronaban los reyes que luego vivirían en el palacio contiguo. Dicha catedral llama mucho la atención por su curioso estilo arquitectónico o mejor dicho, su falta de este. Cada pontífice quería dejar su marca en el edificio y agregaba un campanario, recinto o capilla. Como esto se llevó a cabo a lo largo de siglos el resultado es un Frankenstein de estilos.
La colina es de acceso gratuito y se puede recorrer hasta la noche. Esto es muy recomendable ya que la iluminación y las vistas del río le dan un aire muy romántico. La entrada al palacio, en cambio, sí es paga y tiene muchas salas y museos para ver. Es un paseo que demora más de medio día así que hay que tenerlo en cuenta. Eso sí, no esperen encontrar joyas o el tesoro de la corona. Todo eso fue robado durante la ocupación nazi que tenía en Wawel su centro de comando.
La colina de Wawel es uno de los principales atractivos que ver en Cracovia y sigue exhibiendo su poderío de antaño.
A pesar de no ser la capital, Cracovia es la ciudad más turística y visitada de toda Polonia. Casi como en revancha hacia el rey Seguismundo III que por puro capricho decidió mudar la capital a Varsovia. Cracovia se mantiene altiva y aunque le hayan quitado el título oficial, sigue siendo la reina de Polonia.
¡La cueva del dragón! Antes de abandonar la colina, una buena idea es visitar la cueva del dragón. ¡Así es! Realmente existe una cueva que va desde la colina hasta el margen del río donde una estatua de 6 m de altura del dragón protege la entrada. Y ¡cuidado! Porque de sus fauces sale fuego verdadero. La entrada para visitantes está detrás de la atalaya de los Ladrones y cuesta 3 PLN por persona.
Que ver en Cracvia: barrio Kazimierz
Fuera de la ciudad antigua hay otros tres barrios que valen la pena visitar en Cracovia. De ellos quizá el más emblemático sea Kazimierz, el antiguo barrio judío.
Está ubicado a pocos minutos a pie de la colina de Wawel y fue originalmente una ciudad independiente fundada en el siglo XIV. Tuvo un gran desarrollo gracias al comercio y llegó a ser la segunda ciudad más importante de Polonia en la Edad Media. Finalmente en 1800 fue anexada a Cracovia.
Aquí vivía la principal colonia de judíos de Polonia, la cual en un principio estaba separada del resto de Kazimierz por un muro. Su corazón erala actual calle Szeroka. Pero luego de la II Guerra Mundial el barrio quedó totalmente arruinado.
Hoy en día la zona experimenta un renacimiento y una nueva imagen. Está lleno de cafés, clubs y galerías fuera del ajetreo de la Plaza Mayor. Algunos de los mejores restaurantes de Cracovia están aquí. Se ha convertido en un barrio con un gran ambiente que se mezcla con los rastros del pasado. Los muros viejos, callejuelas, cementerios y sinagogas que sobrevivieron los traen a la memoria.
Puntos más importantes de Kazimierz:
- Pasear por la Plaza Wolnica y la calle Szeroka
- Mercado de antigüedades en la plaza Nowy
- Sinagoga y Cementerio Remuh
Que ver en Cracovia: barrio Podgórze
Cruzando el nuevo paso peatonal llegamos a la otra orilla del Vístula. Allí encontraremos el barrio de Podgórze que supo ser independiente hasta 1915.
Pero el barrio es tristemente famoso por albergar al Gueto judío de Cracovia que funcionó de 1941 a 1943. En marzo del ’43 el gueto fue vaciado. Los que podían trabajar fueron llevados a campos de concentración y los que no, fusilados. En memoria de este suceso se colocaron una seria de sillas vacías en la plaza Bohaterów Getta. En este barrio se encuentra también la famosa fábrica de Oskar Schindler donde se filmó (junto con Kazimierz) la película de S. Spilberg.
Si bien el fantasma de la II Guerra es lo que más marca a Podgórze, también cuenta con otros atractivos. Uno de ellos es la iglesia neogótica de San José, que parece monumental por la forma triangular de la plaza frente a ella. También está el montículo de Krak (luego hablaremos más en detalle sobre los montículos de Cracovia) o el moderno edificio de la Cricoteka (Centro de Documentación del Arte) que intenta soplar nueva vida al barrio.
Puntos más importantes de Podgórze:
- Iglesia San José
- Montículo de Krak
- Cricoteka
- Plaza Bohaterów Getta
- Farmacia “Bajo el Águila”
- Fábrica Emilia de Oskar Schindler
- Iglesia y fuerte San Benito
- Cementerio viejo de Podgórze
Que ver en Cracovia: barrio Nowa Huta
Mientras que la Europa Occidental se veía liberada luego de la II Guerra Mundial y sus respectivos gobiernos se reestablecían, Polonia simplemente cambió un monstruo por otro. Al terror de los nazis lo reemplazó el terror al viejo camarada Stalin.
La mejor muestra del comunismo en Cracovia la encontramos en Nowa Huta. Allí en 1949 las autoridades decidieron construir una ciudad ideal y funcional. Un trazado urbano perfecto y simétrico que contrasta con el centro de Cracovia. En el barrio vivían los 38.000 operarios del nuevo complejo metalúrgico (el más grande de Polonia).
Pasear por el barrio es como volver a los años 50. Es también el hogar de muchas historias bizarras y tragicómicas del período comunista. Por ejemplo, el barrio se construyó con bunkers para proteger a los habitantes frente a un posible ataque de la OTAN. Pero estos mismos elementos defensivos hicieron difícil a la policía detener a los manifestantes que protestaban contra el régimen. Lo ideal es disfrutarlo con un tour.
Que ver en los alrededores de Cracovia
Si bien la ciudad en sí misma es muy interesante y hay mucho que ver en Cracovia, sería imprudente no mencionar las increíbles atracciones que hay en sus alrededores. Algunas de ellas ameritan el viaje por sí solas.
Los misteriosos montículos de Cracovia
Estos montículos son una de las mayores atracciones turísticas de Cracovia. Dos de ellos, el de Krak (en Podgórze) y el de Wanda (en Nowa Huta), son enigmáticos túmulos de épocas precristianas, construidos por las tribus autóctonas. Se desconoce que motivó semejante esfuerzo de los habitantes pero se dice que allí están enterrados el mitológico rey Krak, fundador de Cracovia (el de la leyenda del dragón) y su hija Wanda.
En los tiempos modernos se han construido dos montículos más en honor a los héroes nacionales: Josef Pilsudski y Kosciuszko (Sowiniec). El último es el más imponente y con una gran vista de la ciudad.
Minas de sal de Wieliczka
Otro de los Patrimonios de la Humanidad y top 10 de las atracciones que ver en Polonia. Esta descomunal mina de sal estuvo en funcionamiento ininterrumpido por más de 700 años. Tiempo suficiente para excavar más de 300 km de túneles y cámaras hasta una profundidad de más de 300 m (el equivalente a la altura de la Torre Eiffel). Si bien estos números impresionan, verlo en persona es inigualable. Cámaras de hasta 40 m de altura, lagos subterráneos y obras de arte se quedan en la memoria.
El campo de concentración Auschwitz
El tristemente célebre campo de exterminio se encuentra a una hora y media de Cracovia. Este fue el principal motivo que nos llevó a la ciudad y no podemos más que decir que es una experiencia sobrecogedora. A pesar de que ya pasaron más de 70 años, en el lugar se mantiene un aura de maldad casi palpable.
Los montes Tatras
Cracovia es también un buen punto de partida para llegar al lugar más bello de Polonia. Los montes Tatras y Zakopone, la capital invernal de Polonia, se encuentran a sólo 100 km hacia el sur.
Presupuesto para una visita de 3 días en Cracovia
La ciudad es un destino excelente para una escapada de fin de semana largo. Esto se debe a que cuenta con la combinación ideal: hay cosas increíbles que ver en Cracovia y además es muy accesible. A continuación les detallamos nuestros gastos para 3 días en Cracovia. Todos los precios son para dos personas.
- Alojamiento en Airbnb (3 noches): €112
- Excursión a Auschwitz: €78
- Entrada a las minas de sal: €42
- Viajes en tren (ida y vuelta al aeropuerto y a las minas de sal): €12
- Dejar las valijas de mano en la estación de tren: €2
- Comida*: €100
TOTAL: €346
*Cabe aclarar que comimos 3 veces en restaurantes y muy bien porque queríamos probar los platos típicos. Para dos cenas aprovechamos la cocina del departamento que alquilamos y nos cocinamos. Así que si lo desean este número lo pueden ajustar un poco más.
Finalmente falta agregar los tickets de avión. No los pusimos porque son muy variables y dependen de la ciudad desde la que viajen. Pero si reservan con tiempo o encuentran una promo pueden sacarlos barato.
Con todo, podemos concluir que con €500 pueden armarse una escapada a Cracovia con todo incluido y a todo lo que da (visitar las minas de sal, Auschwitz, recorrer la ciudad, comer comida típica, etc.).
Ayuda al viajero
¿Cómo llegar a Cracovia?
Cracovia es accesible tanto por avión como por tren (y obviamente auto). Su aeropuerto (Juan Pablo II) está a unos 10 km del centro y cuenta con estación de trenes, lo que permite llegar a la ciudad en 20 minutos. La estación central de trenes se llama Kraków Główny y conecta con otras ciudades importantes de Europa.
Buscar vuelos baratos a Cracovia en Skyscanner!
¿Cuál es la moneda y el Cambio?
Si bien Polonia pertenece al espacio Schengen no adoptó el Euro como moneda. En cambio utilizan el Zloty y la relación con el Euro es aproximadamente de 4 a 1. Pueden ver la cotización exacta aquí.
En general Polonia nos resultó bastante accesible. Para dar un ejemplo, se puede comer muy bien en un restaurante por €25 para dos personas. Podemos decir a groso modo que los precios están un 25% más baratos que en Alemania.
En los tres días que pasamos en Cracovia sólo necesitamos cambiar dinero una vez y fue para pagarle al señor que guarda las valijas en la estación de tren. Todo lo demás: tren, restaurantes, supermercado, etc. se puede pagar tanto con tarjeta de crédito como débito.
En caso de que necesiten cambiar ¡¡no lo hagan en ninguna de las casas de cambio de la calle Florianska!! Son una trampa para turistas y el precio que promocionan no es el que realmente te dan.
¿Dónde hospedarse en Cracovia?
El alojamiento en Cracovia es de lo más económico que hemos conseguido en Europa hasta el momento. Si lo que encuentran en el casco antiguo es caro, una buena opción es buscar al norte de la ciudad antigua (donde está la Barbacana). Esta zona está bien porque se llega caminando tanto al centro como a la estación central de trenes. Nosotros conseguimos allí un departamento por Airbnb.
Registrarte en Airbnb a través de este link y recibí €25 de descuento en su primera reserva
¿Qué tours contratar en Cracovia?
Por fortuna Cracovia cuenta con los conocidos Free Walking Tours. Nosotros les recomendamos los de la empresa Walkative. No es que tengamos convenio con ellos sino que nos gustó como lo hicieron, dan mucha información y además pagan impuestos y ofrecen tickets a quien lo pida, así que es legal.
Cuentan con tours en cada uno de los barrios que les mencionamos, lo cual es una buena opción para recorrerlos. Nos quedamos con las ganas de hacer algunos por falta de tiempo…
Página oficial de turismo de Cracovia
La oficina de turismo de Cracovia cuenta con una página web muy interesante y con buena información. Pueden acceder a ella a través de este link.
Deja una respuesta